Sin necesidad de ir tan atrás como lo quisiera esta usted.
Usted, que con el simple hecho de haber puestos sus ojos sobre mi; vino, se fue, vino, se volvió a ir, vino una vez mas y se fue sin mas; y así sin mas también me supo complicar la vida un tanto.

La culpa no es toda suya, ojala lo fuera... de pronto seria mas fácil lidiar con todo.
Hace mucho que no escribo, tanto, que tuvo tiempo de hacer y deshacer y yo apenas vengo a organizar unas palabras para todo esto.
Aunque lo único que he sabido hacer en estos meses es nadar en contra de la corriente a decir verdad necesitaba a alguien como usted, con seguridad, experiencia, carisma y amistad de tiempo. Así como usted, aunque me digan que estoy muy equivocada, así me lo imaginaba.
No es del todo culpa suya porque tuvo mi consiente autorización...tanta fue la premura de querer continuar con eso que me hizo sentir tan bien que accedí sin leer los términos y condiciones del trato.
Quería saber como era tenerlo allí para mi...el problema era ese que no estaba allí para mi sino al contrario.

Equivocaciones las hay...por miles. Pero en total estar con usted no fue una de ellas, episodios y cosas que se dijeron preferiría olvidarlas para que el recuerdo fuera realmente bueno.
Desde ese día otra Laura nació sólo yo lo puedo saber así de bien y gracias o no a usted soy otra persona, me siento diferente, un poco mas cercano a lo que me imagino que voy a llegar a ser.

No habrá rencores, porque me mostró un usted mas real que sólo yo se es muy diferente al que muestra frente al resto, porque ahora tengo otro tipo de seguridad por eso usted siempre será para mi: USTED.